No se porque pero cada año, cuando pasamos el 15 de Agosto, parece que el verano empieza a decaer. Tal vez sea porque los días son más cortos o porque, quienes tenemos hijos en edad escolar, ya casi nos vemos inmerson en la rutina.
Desde luego, no tengo queja. Este verano hemos aprovechado a tope cada momento y hemos podido disfrutar del sol, la playa y la piscina sin los agobios del calor. ¡¡Y lo que aún nos queda!!
Ya sabéis que en el norte cuando cae la tarde empieza a refrescar. Sin embargo últimamente las noches son muy agradables e invitan a salir a una terraza o a quedarte en casa y salir a la terraza, al balcón o al más mínimo espacio exterior que tengamos.
Todo este rollo viene porque estaba yo pensando lo agradable que se debe estar en un sillón como el de la imagen, con un estupendo reposapiés, una bebida refrescante y un par de mantitas por si al anochecer refresca ...
¡¡Feliz día!!
Foto: ¿?
Justo hablaba de eso hace unos días con una amiga. Para ella el verano acaba después de los fuegos. Para mí, que siempre he cogido las vacaciones a finales de septiembre (e incluso en octubre) duran un poquito más :)Pero es cierto que con el colegio de los niños eso cambia! Ellos marcan los ritmos! Besos.
ResponderEliminarNo podías haberlo definido mejor, Ana.
ResponderEliminarCasi deseo que el curso haya empezado para tener todo bajo control y disciplinarme porque, como tú, me quedaría en esa terracita con la mantita, un buen libro...
Disfrutemos mientras podamos.
Besos
Piola
Uf, sí me gustaria estar en esa terraza, y sobre todo necesitar una mantita..., ¡¡¡qué calor!!!
ResponderEliminarGracias por recordarme que no siempre va a hacer este calor :)
Ya te digo...
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